Las Páginas Amarillas - Yo, soledad y autodesprecio.
Los humanos somos sociales por naturaleza. Hemos perfeccionado un instinto de sociabilidad desde la época en la que aún no éramos capaces de caminar erguidos, pues siempre ha funcionado como herramienta para establecer vínculos con buena parte de los otros seres que nos rodean. Estamos habituados a socializar porque es una pilar fundamental de la estructura del mundo y fuera de los beneficios que el ser social le brinda al mundo en conjunto, el tener cierto nivel de cortesía con nuestros iguales juega también un papel importante en lo que al ámbito emocional nos referimos, nos ayuda a perfeccionar nuestras habilidades sociales, a tener un desarrollo personal eficiente y ayuda a entender que no somos los únicos en este planeta. Casi pareciese que con lo anterior nadie podría elegir vivir en soledad, puesto que no solo se trata de un estado antagónico de individualismo que puede ser dañino a largo plazo, sino que, además fue insertándose parasitariamente en el imaginario colectivo como uno de los miedos primordiales porque, ¿Quién no le tiene miedo a la soledad?
Es curioso como siempre me remito a los mecanismos de supervivencia en este Blog, pero creo que aún no hubo un tema más adecuado para esos mecanismos, el miedo en sí mismo es un mecanismo de supervivencia, y el miedo a la soledad es uno de esos temas en los que no solemos pensar con regularidad ya que, no es sino hasta entrados unos años en los que le damos importancia a algo que hasta ahora no parecía ser un problema. Con los años la gente se va quedando sola, podemos tener la cuestionable fortuna de morir a una edad no tan avanzada, en la que estemos en compañía de nuestros seres queridos, porque aunque no exista manera correcta de dejar de existir, si hay ciertas condiciones que parece que tenemos que cumplir. Esa enfermiza obsesión que tenemos con dejar un legado, el miedo a ser olvidados, que nuestro nombre sea vigente al menos por unas cuantas generaciones antes de que el olvido nos condené a un destino igual a la inexistencia.
Es como esa paradoja que cuestiona "¿Hace ruido un árbol al caer si no hay nadie para escucharlo?" Podríamos transferirlo a: ¿Realmente existimos si no hay nadie que nos vea?. Si me pongo a pensarlo en profundidad, quizás es por eso que, generalmente, se tiene tanto miedo a la soledad, es una representación evidente de lo insignificantes que somos como especie, planeta, sistema solar, ustedes entienden, no nos gusta sentirnos menos, debemos tener la certeza de que un porcentaje de nosotros mismos pueda ser conocido porque de otro modo la vida perdería parte del poco sentido que podamos hallarle.
Ahora bien, dándonos cuenta de lo absolútamente nefasta que puede resultar la soledad y lo poco que nos ponemos a pensar en ella, es igualmente impresionante el porcentaje de personas que se ven obligadas a vivir en ella, o en mi caso, los que decidimos estar solos por convicción, pues contrario a lo que pueda parecer, hay personas en el mundo que prefieren mantener un perfil bajo, teniendo los conocidos contados e incluso llegando al límite de penalizarse a la soledad. Todo ello puede tener diversos motivos, mayormente derivados de padecimientos psicológicos, baches emocionales y demás circunstancias mentales que hacen que una persona quiera estar aislada del mundo.
No soy un gran fanatico de coleccionar amistades, quienes me conozcan sabrán que en ciertas situaciones prefiero mantenerme al margen de atención y pasar más tiempo como un decorado en el mundo que como alguien activo. Y pese a lo que mi personalidad pintoresca y extrovertida pueda sugerir, considero prudente siempre mantenerse al margen de las relaciones, bien sea como un método de defensa, o bien sea por la obsesión que tengo de leer a las personas al milímetro y encontrar discrepancias en su forma de actuar y de pensar.
Si bien es cierto que de buenas a primeras no suena como un conflicto mayor, a ustedes les admito que a día de hoy es una de esas enfermedades que no me deja vivir a gusto pues ese impulso de mantenerme aislado no es más que una salida de autodesprecio bajo la cual pretendo redimirme frente a mi mismo.
Algunas de las cosas que van a leer a continuación son sacadas de mi diario, como ya les venía diciendo desde el post anterior. No se alarmen por lo que van a leer, son esa clase de pensamientos que se le escapan a uno en las noches de desasosiego en las que el insomnio, la tristeza y la nostalgia cobran protagonismo en lo que debería ser un horario de sueño plácido y pacifico. Comparto esto con ustedes ya que quiero que vean mi perspectiva y el motivo de mi aislamiento social.
24 de Junio
No es que esté solo porque nadie me quiera, estoy solo porque yo mismo me condené a la soledad.
Parece que a lo único a lo que le meto esmero últimamente es a quedarme solo, a despojarme de todo contacto emocional con cada persona que hace un mínimo esfuerzo por interesarse en mí. ¿Por qué? Siendo completamente sincero, a estas alturas tengo la certeza de que es el profundo autodesprecio que siento por mi mismo, no sería capaz de mirar a los ojos a un ser tan desagradable como yo, si no fuera porque estoy obligado, y casi parece que el hacerme daño constantemente es una forma de justicia autoinducida. Soy el acusado, el juez y el verdugo porque no merezco nada más que el peor de los veredictos.
El mejor favor que se pueden hacer es quitarme los ojos de encima y asegurarse de no volver a ponerlos jamás en mi, y si algún día puedo tener la virtud de salir de esta inmundicia llamada depresión, lo mejor que yo puedo es hacer es reconocerle a cada quien los esfuerzos que han puesto para que no viva mi vida encerrado.
27 de Junio
Continuando con lo que sea que haya dicho antes.
Puedo invertir tiempo en lo que yo creo que es mi amor verdadero, o puedo ponerle empeño a la única persona que ha querido ver algo lindo en mi. Hay muchas cosas que puedo hacer y que al final del día no haré, porque mi zona de confort está en el sitio en el que menos cómodo me sienta, yo elijo joderme solo a diario.
No es pequeño el número de personas que han elegido invertir su tiempo en mí, lamentablemente tampoco es pequeño el número de personas que terminaron hartas de mí, entonces, ¿Cuál sería el motivo detrás de buscar compañía? El que no estorba es el que más ayuda y ahora mismo estoy enfocado en permanecer lo más aislado posible. Ya he dado suficientes problemas siendo lo que soy, no tengo el carácter de sentarme a ver cómo aún existen personas que se acercan y ponen su esfuerzo para ver algo rescatable en mi. ¿Con qué cara debería mirarlos? ¿Cual es el propósito de querer ayudar a alguien que no se quiere ayudar?
La exploración que he hecho de mi memoria me retrotrae a mis primeros años, un niño tímido y sobreprotegido que no quería saber nada de nadie, le tenía miedo al mundo y a la gente. Un dia dejó de ser asi, no recuerdo cuándo ni porqué, pero me harté de estar siempre en una esquina y levanté el ánimo para ser algo más, no mucho mas, tambien es cierto, sin embargo, comprendí que estaba en una posición desfavorable al no querer salir a conocer el mundo, por muy limitado que el mundo pueda ser para una criatura de escasos 6 años aproximadamente. Desde entonces he vivido un sube y baja emocional que siempre me lleva al mismo sitio. La soledad es un lugar en el que no encuentro consuelo alguno, pero también es el único en el que nadie me va a señalar con el dedo por llorar, no quiero hablar con nadie, no quiero tener la necesidad, y por muy difícil que sea, es el lugar al que pertenezco, desconfiando de todo y de todos, presuponiendo que el mundo es un lugar mucho peor de lo que a primera vista parece. Puedo echarle cientos de vistazos a mi situación, analizar opciones, fragmentar mis motivos y deshumanizarme parcialmente ¿Y la conclusión cual es? No me merezco nada mejor, pero no tengo el carácter para sentenciarme a algo peor, ya no.
Pues esto sería todo amigos lectores. Si notan ciertos fallos en este texto es porque la mayoría la redacte en celular y ustedes saben cómo se comportan las aplicaciones para editar texto en móvil, parece que nadie sabe hacer una buena app para esa tarea.
Comentarios
Publicar un comentario